Los valencianos tuvimos la oportunidad de ver las calles ocupadas por toda la parafernalia sindicalista, desde los típicos banderines a un enorme zeppelin con las iniciales CCOO impresas en él.
La manifestación estaba repleta de sindicalistas de los sindicatos primarios: CCOO, UGT, CSIF, CGT... Todos ellos subvencionados por el estado. Y es que a día los sindicatos mayoritarios forman parte de todo ese teatrillo montado por el sistema para abarcar a la mayor parte del pueblo. Me explico.
Hoy en día vivimos evidentemente en un sistema neoliberalista, capitalista agresivo, globalizado, etc. Sistema totalmente contrario a los principios básicos de la izquierda. Bueno, pues ya que al sistema no le conviene tener a la mitad del mundo considerada de izquierdas, lo que ha hecho es comprar la izquierda.
Claros ejemplos los tenemos en la política española actual, empezando por el PSOE, Partido Socialista Obrero Español. Bueno, pues ¿qué queda hoy en día de estas siglas? Partido Español. Y es que ¿cómo puede un partido que ha regalado dinero a los bancos, apoyado medidas claramente capitalistas, hecho reformas laborales que crean mas diferencias económicas entre clases llamarse Socialista?, ¿cómo puede un partido que ha aumentado de forma histórica las cifras de desempleo, haber hecho recortes a las clases bajas para regalar dinero a los bancos llamarse Obrero? Sinceramente me parece un insulto tanto al proletariado como a los socialistas. Y muchos de vosotros pensareis : “y entonces, ¿cómo puede ser que un partido vendido al poder tenga tantos afiliados y votantes supuestamente de izquierdas?” La respuesta es clara: Los medios. Se han encargado de que esta democracia consista en rojo o azul, progre o conservador y no se han interesado por mostrar otras alternativas. Quizá alguna noticia de IU, pero se encargan de pintarles como un partido que “como no va a ganar, para que votarle”.
Pero en fin, debe ser, que como con la bajada de pantalones del PSOE no era suficiente y también los sindicatos estaban tocanarices, montando huelgas, piquetes, protestas, etc. Dijeron: “pues nada, los compramos también”.
Y ahí están, primero firmando acuerdos con la patronal CEOE para “flexibilizar” el trabajo, es decir, abaratar el despido, aumentar las horas, reducir el sueldo... Y luego manifestándose en la calle, y juntando ni más ni menos que a 200.000 engañados en las calles de Valencia. Enciende uno la tele, y se encuentra al señor Cándido Méndez, con su rolex que es el sueldo de mi madre de 3 meses, diciendo que la patronal lo que quiere es explotar al trabajador y que la reforma es injusta.
Por no hablar de toda esa gente, orgullosa de ser del sindicato, que se pide días libres para las reuniones. ¿Reuniones? Mariscadas que paga el estado gustosamente a cambio de que no se pasen de la raya. Gente que se escaquea del trabajo para hablar de si van a comprarse un BMW o un Audi. Y que encima se creen los mas revolucionarios del mundo, y lo único que son es vendidos y vendedores.
Habrá quien diga:
-¡Qué drástico eres! entonces, ¿cuál es la solución?
Pues está claro: La calle.
Primero intentar conseguir nuestros derechos de forma pacífica pero activa, y si no funciona con vandalismo organizado. Los derechos no se negocian en los despachos, se defienden en la calle, a base de que la clase política tenga claro que si comete un error que pueda llevar al pueblo a una situación ni si quiera parecida a la que actualmente tenemos, saldremos a la calle a por ellos. Y si entre mi derechos y yo hay un policía enseñando los dientes, tendré que pasar por encima.
-Joder, que radical eres. Y que violento.
¿Violencia?
Violencia es no poder vivir tranquilo sabiendo que en cualquier momento te van a despedir por 4 duros. Violencia es tener un jefe que te exprime día a día, y que tu tengas que estar besándole el culo 8 horas diarias. Violencia es tener que estar andando de trabajo en trabajo sin poder tener nada fijo. Violencia la forma en que el sistema nos trata a nosotros. ¿Y nosotros al sistema? con pacifismos absurdos y extremos de lso cuales hablaré en otra entrada.
Preguntas frecuentes:
¿Qué debo hacer si quiero formar parte de un sindicato, pero no quiero que esté subvencionado, ni que haya liberados?
Existen sindicatos todavía fieles a sus ideales, que no aceptan limosnas del estado ni tienen a gente pagada en las oficinas sin pegar ni chapa. El mas conocido es la CNT.
Vídeos
Una canción que refleja la situación del sindicalista típico
Aquí un vídeo de un antiguo miembro de CCOO
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